Su cuerpo resonaba en el espejo
vertebrado en imágenes distantes:
uno y múltiple, espeso, de reflejo
reverso ahora de inmediato antes.
Entraba de anterior huida al dejo
de sí mismo, en retornos palpitantes,
retenido, disperso, al entrecejo
de dos voces, dos ojos, dos instantes.
Toda su asencia estaba —en su presencia—
dilatada hasta el próximo asidero
del comienzo inminente de otra ausencia:
rumbo intacto de espacio sin sendero
al inmóvil azar de su querencia,
¡estatua de su cuerpo venidero!
Este poema es cortito y bonito de este autor son contados los poemas que conosco pero este es el que mas me gusta por el tema y profundidad :)
Me agrado tu poema espero y sigas subiendo mas de este tipo de poemas.
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